Su tamaño
está
acorde con el entorno en que se encuentra, una reducida plaza de 15 m²
situada en el barrio de la Judería, sin más entrada ni salida que la
también diminuta calle de estilo morisco, Pedro Jiménez (más bien
conocida como calle del Pañuelo). Se accede a ella a través de la plaza
de la Concha, enlazada ésta, por la calle dedicada al músico Martínez
Rücker, a la Mezquita- Catedral.
Es
una fuente mural con hornacina de ladrillo cocido. A través del caño
vierte su agua sobre un antiguo brocal de pozo de origen árabe.
Originariamente tenía cuatro azulejos vidriados en verde que lo
rodeaban.
A ambos lados de
la fuente se encuentran unos pequeños arriates con dos naranjos, y
jazmines, dependiendo de la época. En una de las esquinas de la calle
encontramos un capitel toscano.
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